22 de junio de 2011

ahh...

Te encontré. Te busqué y te encontré. No sé muy bien por qué lo hice. Hacía mucho tiempo que tu nombre no se me pasaba por la cabeza, pero hoy, no sé por qué, empecé a escribir en el buscador tu nombre, y te encontré. Creo que fue inconscientemente, pero eso no importa, te encontré. Estás viva y eso me tranquiliza.

Estuve a punto de enviarte una solicitud de amistad, pero recordé dos cosas: 1. Para eso hay que ser amigos y tú y yo no lo somos. 2. "Es lo mejor para los dos, y lo sabes".  (no, no lo es y no lo sé, pero qué más da a estas alturas).

Vi tus fotos, bueno, las que dejas que se vean. Estás diferente. Me gusta. Me gusta como estás. Se te ve bien y eso me gusta. Pareces contenta. Me gusta

Sé que no leerás esto así que... lo dejo aquí... Bueno, aunque supiese que lo vas a leer, lo dejaría aquí también. No hay nada que quiera escribir sobre tí, al menos no aquí.

PD: Me gustó saber que estás bien.

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